En este libro descubriremos cómo nuestro estilo de apego determina el tipo de relaciones que solemos tener. Puede que nuestra tendencia sea necesitar estar todo el tiempo con nuestra pareja, o que, por el contrario, ante la demanda de atención comencemos a sentirnos agobiados, o que tengamos miedo a no ser correspondidos, o que nos quedemos aferrados a relaciones que no nos hacen bien.
Sea cual sea el caso, esto no significa que tengamos una conducta disfuncional. De hecho, las investigaciones acerca del apego demuestran que estamos biológicamente programados para depender de otras personas. Lo importante es saber cómo funcionamos para conocernos a nosotros mismos y a los demás, y encontrar las herramientas necesarias para llegar a tener vínculos seguros y relaciones más estables y gratificantes.