Si hubiera que definir este libro por un solo adjetivo, ese adjetivo sería práctico. Está pensado para orientar a profesionales que se propongan ayudar a padres y madres de familia preocupados por ser cada día más competentes, es decir, más capaces de enseñar a sus hijos a pensar, a conocer y controlar sus emociones y a respetar los valores morales.
Este libro, es una versión aplicada de Enseñar a convivir no es tan difícil, donde se ofrecen materiales para cuatro cursos, de diez horas cada uno; pero no hace falta hacer los cuatro: cada uno puede seguir o puede dejarlo cuando quiera. Las actividades, propuestas para ser trabajadas en grupo, son divertidas y muy participativas.
Los grupos de padres pueden organizarse en centros docentes, públicos y privados, o a través de servicios sociales, o parroquiales, y otros. Las reuniones se convierten con frecuencia en un espacio de encuentro, intercambio y formación, como lo ha demostrado la experiencia de varios años en los que se ha aplicado este mismo programa.
El libro es un regalo, un instrumento agradable y fácil, para quienes colaboran con los padres en la hermosa tarea de educar a sus hijos.