Los dibujos se pueden interpretar por placer sencillamente, o también para conocer mejor a las personas que creemos conocer bien. En estas páginas encontrarás medios eficaces, cuya exactitud y oportunidad podrás verificar, para la interpretación de los dibujos. Posiblemente descubrirás algunas sorpresas.
Pero, ¡por qué no echar un vistazo a nuestros propios garabatos! Puede resultar interesante dedicar un tiempo a dibujar sobre los distintos temas que proponemos. Después, compara tus dibujos con las explicaciones de los que se presentan en el libro. Como bien supones, para la interpretación no se tiene en cuenta la estética de las formas. Te invito a tomar un lápiz, una hoja de papel y, sobre todo, a dejar de lado las objeciones del estilo “Yo no sé dibujar…”. Otra posibilidad es invitar a tus amigos a dibujar. Créeme, disfrutaréis mucho con los descubrimientos relacionados con el más mínimo trazo. Por tanto, a partir de ahora, ¡mantén los ojos y la mente abierta, y divertíos!