El modo correcto de estudiar no se aprende de una vez por todas. A lo largo de nuestra vida de estudio es necesario que no nos preocupemos solamente de aprender los programas de las asignaturas, sino de aprender a aprender. Para aprender a estudiar, sin embargo, no existe una asignatura concreta; es esta una tarea que debemos realizar en todas las asignaturas. Pero hay aspectos del estudio que son comunes a todo o a gran parte de lo que estudiamos: el estar verdaderamente motivados, la planificación del tiempo, el conseguir un ambiente adecuado, los procesos relacionados con la asimilación de contenidos, la lectura, el subrayar, hacer esquemas y resúmenes, la memorización, el tomar apuntes en clase y el expresar correctamente lo que hemos aprendido a través de la redacción de trabamos y en los exámenes. La reflexión sobre las orientaciones que recibimos a este respecto contribuirán, con toda seguridad, a mejorar nuestro estudio y a lograr un mejor ajuste y bienestar personal.