Hijos que no se van

¿Falta de recursos? ¿Comodidad? ¿Apego a la familia? ¿miedo a la independencia? ¿Presiones de los padres o de la sociedad? Las causas que llevan a los jóvenes a retrasar cada día más su salida de casa son múltiples y complejas, pero también las consecuencias de una convivencia que se va prolongando más y más años: ¿Cómo se adapta la familia a la nueva situación? ¿Satisface a los padres? ¿Y a los hijos? ¿Acaso indica el nacimiento de un nuevo modelo familiar?

Hijos que no se van intenta responder estas cuestiones de una manera rigurosa y abierta, superando posturas de escuela y simplificaciones, con datos y estadísticas, sin perder de vista las situaciones reales y cotidianas de las familias.

Si desea profundizar en las últimas razones de la satisfacción familiar, en las relaciones padres-hijos o en las relaciones humanas en general, esta obra le servirá de trampolín para la reflexión y la indagación personal. Prepárese a ampliar el horizonte de sus sospechas: encontrará aquí las claves para desenmarañar un nuevo fenómeno social que cada día interesa más, tanto a los investigadores culturales como a los miembros de las familias involucradas.