La fobia social causa un malestar clínicamente significativo e interfiere de manera notable en la vida de las personas. A pesar de ello son pocos los fóbicos sociales que se acercan a la consulta en busca de soluciones, quizá porque piensen que se trata simplemente de una forma de ser o porque desconocen que existen intervenciones eficaces para su trastorno.
Este libro muestra cómo la intervención psicológica es eficaz a corto y largo plazo, tanto para la exposición a las situaciones temidas como para la terapia cognitiva-conductual que combina dicha exposición con reestructuración cognitiva de los pensamientos negativos de los pacientes.