IMAS: Programa de Intervención Multidimensional para la Ansiedad Social

La historia vital de una persona afectada por un trastorno de ansiedad social es generalmente una historia de profecías autocumplidas. Con frecuencia se verá a sí mismo como un individuo “torpe”, “tonto” e incapaz de alcanzar cosas que para otros son perfectamente asequibles. Así, la persona afecta de ansiedad social tenderá a renunciar a esos objetivos deseables por parecerle inasumible su coste emocional, confirmándose de este modo su valoración crítica respecto de sí misma y su profecía.

Es habitual que estas personas acudan a la consulta del psicólogo comentando que se sienten deprimidas e insatisfechas por encontrarse solas, sin pareja o amigos, por no verse capaces de prosperar en su trabajo y perder oportunidades laborales, por sus malos resultados académicos, o por problemas derivados del empleo social del alcohol u otras drogas… Todas ellas consecuencias negativas de su excesiva ansiedad social y de las consiguientes conductas de evitación y escape de las situaciones sociales que les hacen sentir incómodas.

Basándose en cinco dimensiones aisladas de forma empírica por una serie de investigaciones que se remontan hasta el año 2010, el equipo formado por Vicente Caballo, Isabel Salazar, Laura Garrido, María Irurtia y Stefan Hofmann presenta en la editorial Pirámide el Programa de intervención multidimensional para la ansiedad social IMAS, que pretende ser una guía paso a paso y sesión a sesión para que el psicólogo clínico pueda planificar y llevar a cabo una intervención sistemática con pacientes que padezcan este trastorno.

Como decimos, el programa ataca las cinco dimensiones de la ansiedad social que los estudios han revelado:

La interacción con desconocidos.
La interacción con el sexo opuesto (o con personas del mismo sexo cuando la atracción sexual tiene este sentido).
La expresión asertiva de molestia, enfado o desagrado.
El miedo a quedar en evidencia o a hacer el ridículo.
Y el miedo a hablar en público o a hacerlo con personas investidas de cierta autoridad.

De hecho, es frecuente que la persona afectada por ansiedad social tenga dificultades tan solo con alguno de estos planos, pero no necesariamente con todos ellos; o bien que la ansiedad le afecte tan solo en alguna de estas dimensiones por no formar parte de su vida algunas situaciones características del resto. El Programa Multidimensional IMAS aborda, por orden de complejidad, todas estas facetas, y para ello combina información, estrategias de aprendizaje y ejercicios de psicoeducación.

El objetivo es ayudar al paciente a disminuir su ansiedad ante las situaciones que desencadenan dicho problema emocional y poner a su disposición una serie estrategias de modo que sea capaz de llevar a cabo aquellos comportamientos que antes evitaba o bien realizaba con gran sufrimiento emocional. En concreto pretende:

lograr que el paciente se exponga a esas situaciones que desea pero evita;
desarrollar en él competencias cognitivas, conductuales y emocionales que le permitan afrontar esas situaciones;
y reducir su tendencia a percibir como amenazas las situaciones sociales.

El programa, que consiste en una intervención grupal semiestructurada para un máximo de 10 pacientes, pero que fácilmente puede adaptarse al abordaje individual, consta de 2 sesiones de evaluación (previas al tratamiento), 15 sesiones semanales de tratamiento en grupo, 2 sesiones de evaluación (una grupal y otra individual), una sesión de apoyo (a los 3 meses de finalizar el tratamiento) y 2 sesiones de seguimiento (una a los 6 meses y otra transcurrido un año desde la finalización del tratamiento).

Las sesiones constan de ocho elementos básicos: psicoeducación, educación en valores, entrenamiento en aceptación, entrenamiento en atención plena (mindfulness), reestructuración y desvinculación de los pensamientos, entrenamiento en habilidades sociales, exposición y tareas para casa. Dichos elementos se desarrollan mediante instrucciones, ensayos grupales, observación de modelos en vídeo, autoexposición, autorretroalimentación y retroalimentación, ejercicios dentro y fuera de la sesión, material de psicoeducación y tareas para casa.

Si bien se recomienda que el programa esté dirigido por un psicólogo de orientación conductual o cognitivo conductual, en él se combinan las técnicas tradicionales de la TCC, como son la reestructuración cognitiva, la exposición o el entrenamiento en habilidades sociales, con aportaciones de las denominadas terapias de 3ª generación, como la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT), la atención plena (mindfulness) o la Terapia Dialéctica Conductual (DBT). De manera que el programa incorpora y adapta parte de estos procesos: la educación en valores, la aceptación de emociones y sensaciones, la desvinculación de los pensamientos, el centrarse en el aquí y ahora o el actuar en la dirección opuesta.

Aparte del “Libro del terapeuta”, la obra se acompaña también de un extenso “Libro del paciente”, un volumen práctico que aspira a dar a conocer las características básicas del problema y a contribuir a que se inicie el proceso de cambio personal mediante autorregistros (59 tablas), figuras explicativas y de registro (38) y ejercicios (121 en total).

En resumen, el Programa de intervención multidimensional para la ansiedad social IMAS nos parece una contribución decisiva para el abordaje de esta problemática, que combina lo mejor de distintas corrientes para ofrecer un protocolo detallado sesión a sesión, concebido para facilitar su aplicación por parte de los profesionales de la salud mental.

Viene a completar la bibliografía sobre ansiedad social en adultos disponible en español, en donde podemos reseñar también estos otros títulos: