La revolución sexual fue un libro clave entre la juventud revolucionaria de los años 60 y 70. En él, Reich critica a la sociedad patriarcal contemporánea y su moral. Explica, basándose en Malinowski, cómo la represión de la sexualidad, constatada especialmente en edades tempranas, sirve para crear personas desvitalizadas y obedientes al sistema. Al igual que Otto Gross, Reich ilustra cómo la familia, inconscientemente, reproduce en los hijos la ideología, la moral y las estructuras psíquicas que benefician al statu quo, dando lugar a personalidades sumisas pero también autoritarias, y cómo puede generar trastornos emocionales y, además, servir como caldo de cultivo al fascismo (coo también explicó en Psicología de masas del fascismo). Ante esto, Reich contraponía la autorregulación de la persona, de sus emociones y de su psique. Dicho concepto de autorregulación fue incorporado por Alexander Neill a su pedagogía.